miércoles, 6 de noviembre de 2013

MAMÁ ADOLESCENTE: RIESGOS ASOCIADOS

Ser madre a una edad muy temprana es un gran reto en todos los sentidos. Cuanto más joven seas, más probable será que tu embarazo conlleve un riesgo y requiera más atención y algunos cuidados especiales. Esto, por supuesto, no significa que no puedas tener un bebé perfectamente sano.

 Los riesgos de un embarazo antes de los 20 años

Diversos estudios indican la existencia de una serie de problemas y complicaciones médicas que ocurren con mayor frecuencia en madres menores de 20 años. Entre estas posibles complicaciones se encuentran:

  • Aborto.
  • Un parto prematuro.
  • Cesárea.
  • Desproporción cefalopélvica.
  • Un bebé con bajo peso al nacer.
  • Malnutrición materna.
  • Anemia.
  • Hipertensión gestacional.
  • Preeclampsia, (complicación médica del embarazo que combina presión arterial elevada y cantidades excesivas de proteína en la orina de la madre). 
  • Hemorragias asociadas con afecciones placentarias.
  • Enfermedades de transmisión sexual.
  • Infecciones urinarias.
  • Depresión o ansiedad.
  • Diabetes gestacional.
  • Problemas asociados con fumar durante el embarazo.
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Estos riesgos aumentan cuanto más joven sea la madre: suelen ser más comunes en menores de 16 años, y aparecen con menos frecuencia a partir de los 17. Pero esto no significa que necesariamente vayan a aparecer estos problemas; de hecho tienen más que ver con la falta de atención médica, con empezar tarde a asistir a las citas prenatales, y con ciertos hábitos nocivos (fumar y consumir sustancias peligrosas, una mala alimentación), que con la edad en sí.
 
 
 Algunos artículos académicos interesantes que podéis leer sobre este tema son los siguientes:
 


A continuación también mostramos un enlace a un estudio realizado en España, que contrasta la relación entre la maternidad adolescente y el parto prematuro:

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