viernes, 29 de noviembre de 2013

LITERATURA PARA EMBARAZADAS: CINCO TÍTULOS PARA APRENDER SOBRE EL EMBARAZO

Cuando te quedas embarazada, comienzan tus dudas y preocupaciones. "¿Lo estaré haciendo bien?" "¿Qué será bueno y malo para el bebé?" Para resolver tus dudas, lo mejor siempre es consultar con tu médico o el personal de Enfermería. Sin embargo, una opción para complementar lo que ellos puedan decirte es la lectura. Y, aprovechando que tienes 9 largos meses de espera... te vendrá de perlas saber cuáles son algunos de los libros más recomendados para las mujeres embarazadas:

1. "Qué se puede esperar cuando se está esperando" (Medici, 2009).

Ésta es una guía útil para encontrar respuestas a tus preguntas. Te explica mes a mes los cambios que tienen lugar en tu cuerpo y la evolución de tu bebé, los síntomas que puedes experimentar y cómo hacerles frente, y en general ofrece información útil para llevar un embarazo saludable… Responde a tus preguntas sobre si es normal lo que te está pasando, y puede ayudar a reducir tu ansiedad. Este libro se ha convertido en pocos años en un auténtico referente para muchas mujeres que lo denominan "la biblia de la embarazada". Es una obra aconsejada para futuras madres prácticas que buscan una respuesta sencilla, pero convincente, a todas sus dudas (incluso las más triviales).

2. "Gimnasia para embarazadas" (Hispano europea, 2011).
Es un título recomendable para todas las embarazadas que quieren mantenerse en forma durante la gestación. Incluye un programa de ejercicios permitidos durante el embarazo, pautas para entrenar el suelo pélvico y ejercicios para la recuperación.

3. "Un regalo para toda la vida" (de Carlos González).
Aquí encontrarás todo lo que necesitas saber sobre la lactancia. También en la lactancia es esencial estar bien informada, para no dejarte confundir por consejos basados en creencias o prejuicios (y éstos abundan).

4. "Dietas para embarazadas" (La Esfera de los Libros, 2007).
En esta obra de la dietista y nutricionista Marta Anguera, se ofrece una guía completa para cuidar la alimentación durante la gestación y en la etapa posterior. La nutricionista enseña cómo planificar menús equilibrados y específicos para las mujeres que padecen algunas de las molestias del embarazo como acidez o anemia.

5. "Ella va a tener un bebé: todo lo que un hombre debe saber y hacer cuando la mujer a quien ama está embarazada" (Urano 2001).
Este manual escrito por y para hombres está redactado en clave de humor, para que los futuros padres entiendan el proceso del embarazo y aprendan a participar y acompañar a su mujer durante la
gestación.

jueves, 28 de noviembre de 2013

MONITORIZACION FETAL

La monitorización fetal es una prueba que se realiza para controlar el bienestar del feto en el útero y su estado de salud y el de la madre.
Esta prueba revela información importante sobre el feto y la madre:
  • Frecuencia cardíaca del feto
  • Presencia y duración de las contracciones uterinas
  • Repuesta del feto a las contracciones uterinas a través de su ritmo cardíaco
Esta prueba se recomienda de forma rutinaria a todas las mujeres que se encuentran en el último mes de embarazo.

¿CÓMO SE REALIZA?

Puede realizarse por dos vías diferentes:
  • Monitorización fetal externa: se realiza utilizando un cardiotocógrafo. Se colocan dos sensores transductores en el abdomen de la madre, estos estarán conectados a un ordenador que va reflejando en una gráfica los datos que le transmiten los sensores. Uno registra el latido cardíaco del feto y el otro las contracciones uterinas.


  • Monitorización fetal interna: se realiza colocando un electrodo en el cuero cabelludo del feto introduciéndolo a través del cuello del útero.

 Aunque la información obtenida por vía interna es más precisa, generalmente se realiza la monitorización fetal por vía externa, porque no es invasiva. Realizarla por vía interna conlleva riesgo de infecciones y de provocar hematomas al feto en el cuero cabelludo.

¿CUÁNDO?
Generalmente esta prueba se realiza durante el último mes de embarazo y una vez por semana. La duración de esta es de aproximadamente 30 minutos.
Si superamos la semana 40 de embarazo la monitorización se realizará cada 3 días.
Por último, si se trata de un embarazo de riesgo, el ginecólogo determinará si es necesario realizar monitorizaciones desde antes del último mes.
Además durante el parto también se monitoriza al feto para controlar cómo va tolerando las contracciones y el trabajo de parto.

INTERPRETACIÓN DE LOS RESULTADOS
Esta prueba permite detectar o descartar la existencia de sufrimiento fetal u otras alteraciones, como:
  • Reducción del flujo sanguíneo del feto
  • Mala posición fetal
  • Posible falta de oxígeno del feto
  • Desprendimiento prematuro de la placenta
El corazón del feto late a un promedio entre 120 y 160 pulsaciones por minuto, por lo que si durante la monitorización obtenemos valores por debajo de 120 o por encima de 160 pulsaciones por minuto esto significa que el bebé podría estar presentando alguna de las complicaciones nombradas anteriormente. Si esto es así, se deben realizar otras pruebas como la medición de los niveles de pH en la sangre del feto, etc.

INFERTILIDAD

Muchas veces hemos escuchado decir a alguien que no puede tener hijos por causa de la infertilidad. Pero, ¿sabemos qué significa exactamente este término?
 
Infertilidad significa no poder lograr un embarazo después de haberlo intentado durante un año. A mayores, una mujer que sufre abortos espontáneos continuamente también tiene infertilidad. Muchas parejas tienen este problema. Aproximadamente en un tercio de los casos, la infertilidad proviene de la mujer; en otro tercio, es ocasionada por el hombre. El resto de los casos es a causa de ambos integrantes de la pareja, o bien no se encuentra una causa específica.
 
La infertilidad puede dividirse en dos categorías:
  • Infertilidad primaria: se refiere a las parejas que nunca han podido lograr un embarazo después de al menos un año de relaciones sexuales (coito) sin protección.
 
  • Infertilidad secundaria: se refiere a las parejas que ya han logrado al menos un embarazo en el pasado, pero que no son capaces de volver a obtener uno en la actualidad. 
 

¿Cuáles son las causas de la infertilidad?

 
La infertilidad puede ser causada por un amplio rango de factores físicos y emocionales, y puede deberse a problemas en el hombre, en la mujer o en ambos.
  • Infertilidad femenina: la infertilidad femenina puede ocurrir cuando: 
    • Un óvulo fecundado o el embrión no sobrevive una vez que se fija al revestimiento del útero.
    • El óvulo fecundado no se fija al revestimiento del útero.
    • Los óvulos no pueden movilizarse desde el ovario hasta el útero.
    • Los ovarios tienen problemas para producir óvulos.
           Esta infertilidad femenina puede ser causada por:
    • Trastornos autoinmunitarios, como el síndrome antifosfolipídico (SAFL).
    • Cáncer o tumor.
    • Trastornos de la coagulación.
    • Diabetes.
    • Neoplasias (como miomas o pólipos) en el útero y el cuello uterino.
    • Defectos congénitos que afectan el tracto reproductor.
    • Ejercicio excesivo.
    • Trastornos alimentarios o desnutrición.
    • Uso de ciertos medicamentos, entre ellos fármacos quimioterapéuticos.
    • Consumo excesivo de alcohol.
    • Obesidad.
    • Edad avanzada.
    • Infección pélvica o enfermedad inflamatoria pélvica (EIP).
    • Cicatrización a raíz de infección de transmisión sexual, cirugía abdominal previa o endometriosis.
    • Tabaquismo.
    • Cirugía para prevenir el embarazo (ligadura de trompas) o falla de la cirugía de recanalización de trompas.
    • Enfermedad tiroidea.
    • Muy poca o demasiada cantidad de ciertas hormonas.
 
  • Infertilidad masculina: la infertilidad masculina puede deberse a:
 
    • Una disminución en el número de espermatozoides.
    • Espermatozoides que resultan bloqueados y no pueden ser liberados.
    • Espermatozoides que no funcionan adecuadamente.
          
           La infertilidad masculina puede ser causada por:
    • Exposición a mucho calor durante períodos prolongados.
    • Anomalías congénitas.
    • Tratamientos para el cáncer, entre ellos quimioterapia y radiación.
    • Contaminantes medioambientales.
    • Consumo compulsivo de alcohol, marihuana o cocaína.
    • Impotencia.
    • Infección.
    • Obesidad.
    • Edad avanzada.
    • Cicatrización a raíz de enfermedades de transmisión sexual, lesión o cirugía.
    • Tabaquismo.
    • Demasiadas o muy pocas hormonas.
    • Consumo de ciertos fármacos, como cimetidina, espironolactona y nitrofurantoina.
    • Vasectomía o falla de la vasostomía.

Las posibilidades de quedar en embarazo en parejas saludables menores de 30 años y que tengan relaciones con regularidad es aproximadamente de un 25 a un 30% mensual. El punto de máxima fertilidad de una mujer está a comienzos de los 20 años de edad. Después de los 35 años, y especialmente después de los 40, las probabilidades de que una mujer quede embarazada disminuyen considerablemente. La edad cuando la fertilidad comienza a declinar es diferente de una mujer a otra.

¿Cuál es el tratamiento?

El tratamiento depende de la causa de la infertilidad, y puede consistir en:

  • Educación y asesoría.


  • Medicamentos para tratar infecciones y trastornos de coagulación.

  • Medicamentos que le ayudan a la mujer a formar y liberar óvulos de los ovarios.

Además se pueden incrementar las probabilidades de quedarse embarazada cada mes teniendo relaciones sexuales al menos cada tres días antes y durante la ovulación. Para saber cuándo serían estas fechas, consulte nuestra entrada "Cómo saber cuáles son tus días fértiles". También puede influir si estás por debajo o por encima de tu peso ideal; el hecho de lograr un peso más saludable puede incrementar tus probabilidades de quedar embarazada.
 

¿Cuál es el pronóstico de la infertilidad?

Hasta 1 de cada 5 parejas a quienes se les diagnostica la infertilidad finalmente logran un embarazo sin tratamiento.
Más de la mitad de las parejas con infertilidad consiguen el embarazo después de un tratamiento, sin incluir técnicas avanzadas como la fecundación in vitro (FIV).

A continuación incluimos un enlace a un artículo de la Revista Colombiana de Obstetricia y Ginecología, que nos explica más detalladamente qué es la infertilidad y cuáles son sus causas:



CULTIVO VAGINAL

El cultivo vaginal es una prueba médica que sirve para detectar la presencia de estreptococos del grupo B en la vagina. Esto es gran relevancia porque se corre el riesgo de que los estreptococos que pasen al recién nacido en su paso por el canal del parto.
Esta prueba se re hace a todas las mujeres gestantes.

¿CÓMO SE REALIZA?
Se utiliza una especie de bastoncillo de algodón, este se impregna con una muestra de exudado vaginal para posteriormente realizar un cultivo en el laboratorio de microbiología. En ocasiones, también se toman muestras del recto.




¿CUÁNDO?
Esta prueba se suele realizar en el tercer trimestre, unas semanas antes de la fecha probable de parto, entre la semana 35 y 37. De esta forma se aseguran de que tendrán los resultados antes de que se produzca el parto.

RESULTADOS
Si el resultado es negativo significa que no hay presencia de estreptococos.
Por el contrario si el resultado es positivo debemos de tenerlo en cuenta. El día del parto la madre será tratada con antibióticos, que para que sean efectivos se deben suministrar por lo menos cuatro horas antes del nacimiento del bebé.
Pero si el parto es rápido y no da tiempo a administrarle el tratamiento a la mujer, se le inyectará penicilina al recién nacido y se observará su evolución.


FUENTES:

http://elembarazo.net/pruebas-embarazo-cultivo-vaginal.html
http://www.embarazopasoapaso.com/estoy-embarazada/prueba-del-estreptococo-o-exudado-vaginal-rectal/

miércoles, 27 de noviembre de 2013

¿QUÉ ES... LA ENDOMETRIOSIS?

 

La palabra "endometriosis" hace referencia a un problema que afecta al útero de la mujer. Tiene que ver con el recubrimiento del útero, llamado endometrio o tejido endometrial. Normalmente, el endometrio se descama y se renueva cada mes con el periodo o menstruación, eliminándose con el flujo menstrual.

 El tejido endometrial, por lo general, solo se encuentra dentro del útero. Sin embargo, si se padece endometriosis, es posible que el tejido endometrial se extienda a través de las trompas de Falopio y crezca en los ovarios, la pelvis, la vejiga, el intestino o en otras áreas. Cuando aparece la menstruación, este tejido se hincha y sangra, como lo hace el que recubre el útero. Esto, a menudo, es doloroso, y se puede formar tejido cicatricial en el área pélvica. Este tejido "mal ubicado" puede causar dolor, infertilidad y períodos menstruales muy abundantes. 

¿Cuáles son los síntomas de la endometriosis? 

 No es fácil determinar si se padece este problema. El dolor es el principal síntoma de la endometriosis. Una mujer con esta enfermedad puede tener:
  • Períodos dolorosos.
  • Dolor abdominal bajo antes y durante la menstruación.
  • Calambres por una o dos semanas antes y durante la menstruación (los calambres pueden ser permanentes y pueden ser sordos o muy intensos).
  • Dolor durante o después de la relación sexual.
  • Dolor con las deposiciones.
  • Dolor pélvico o lumbalgia que puede presentarse en cualquier momento durante el ciclo menstrual.
 
Aun padeciendo estos síntomas, es posible que el médico no esté seguro de que la endometriosis sea la causa, ya que muchos otros problemas de salud pueden provocar estos tipos de dolor. Es posible incluso que no se manifieste ningún síntoma. Algunas mujeres con un gran número de implantes tisulares en la pelvis no sienten absolutamente ningún dolor, mientras que algunas con enfermedad leve presentan dolor intenso. El primer signo puede ser la dificultad para lograr un embarazo. 

 ¿Cuál es su causa?

 La causa de la endometriosis se desconoce. Una teoría dice que las células endometriales que se desprenden durante la menstruación se devuelven a través de las trompas de Falopio hacia la pelvis, donde se implantan y se multiplican. Esto se denomina menstruación retrógrada. Este flujo menstrual retrógrado sucede en muchas mujeres, pero los investigadores piensan que el sistema inmunitario puede ser diferente en mujeres con endometriosis. Con frecuencia, los analgésicos y las hormonas también se relacionan con este trastorno.

La endometriosis es común y, algunas veces, puede ser hereditaria. Aunque típicamente suele diagnosticarse entre los 25 y 35 años, la afección probablemente comienza alrededor del momento del inicio de la menstruación regular.
Una mujer que tenga una madre o hermana con endometriosis es más propensa a presentar esta enfermedad que otras mujeres. Las probabilidades de presentar endometriosis aumentan si:
  • La menstruación aparece a una edad temprana.
  • Nunca se han tenido hijos.
  • Los períodos menstruales son frecuentes o duran 7 días o más.
  • El himen está cerrado, lo que bloquea el flujo de sangre menstrual durante el período.

  ¿Cómo saber si tengo endometriosis?

El médico realizará un examen físico y analizará los síntomas. La única manera de asegurarse es realizando una laparoscopia pélvica. También se puede realizar una ecografía transvaginal.

 ¿Cuál es el tratamiento para la endometriosis?

El tratamiento depende de los siguientes factores:
  • Edad.
  • Gravedad de los síntomas.
  • Gravedad de la enfermedad. 
  • Si se desean o no hijos en el futuro.
Para muchas mujeres, la endometriosis desaparece en la menopausia, cuando se detienen los periodos.
Si la paciente tiene síntomas leves y en ningún momento desea tener hijos, puede optar por simplemente hacerse exámenes regulares cada 6 a 12 meses, de manera que el médico pueda constatar que la enfermedad no está empeorando. Se pueden manejar los síntomas usando:
  • Ejercicio y técnicas de relajación.
  • Antinflamatorios no esteroides (AINES), como ibuprofeno (Advil), naproxeno (Aleve), paracetamol (Tylenol) o analgésicos recetados para aliviar los cólicos y el dolor.
Para otras mujeres, las opciones de tratamiento abarcan:
  • Medicamentos para controlar el dolor.
  • Medicamentos hormonales para impedir el empeoramiento de la endometriosis.
  • Cirugía para extirpar las áreas de endometriosis o todo el útero y los ovarios.
El tratamiento para detener el empeoramiento de la endometriosis a menudo implica el uso de píldoras anticonceptivas continuamente durante 6 a 9 meses para impedir que usted tenga la menstruación y crear un estado similar al embarazo, denominado pseudoembarazo. Esta terapia usa anticonceptivos orales que contengan estrógenos y progesterona. Este tipo de terapia alivia la mayoría de los síntomas de la endometriosis; sin embargo, no impide la cicatrización ni tampoco neutraliza ningún cambio físico que ya haya ocurrido como resultado de la enfermedad.
Otros tratamientos hormonales pueden abarcar:
  • Progesterona en pastillas o inyecciones. Sin embargo, los efectos secundarios pueden ser molestos y abarcan depresión y aumento de peso.
  • Agonistas de la gonadotropina como acetato de nafarelina (Synarel) y el Depo Lupron para impedir que los ovarios produzcan estrógenos y crear un estado similar a la menopausia. Los efectos secundarios abarcan: sofocos, resequedad vaginal y cambios en el estado de ánimo. El tratamiento por lo general se limita a seis meses porque puede llevar a pérdida de la densidad ósea. En algunos casos, se puede extender por hasta un año.
La cirugía se puede recomendar si usted tiene dolor intenso que no mejora con otros tratamientos y puede abarcar:
  • La laparotomía o laparoscopia pélvica para diagnosticar endometriosis y extirpar todos los implantes y tejido cicatricial (adherencias).
  • Histerectomía para extirpar el útero (matriz) si usted tiene síntomas graves y no desea tener hijos en el futuro. También se pueden extirpar uno o ambos ovarios y las trompas de Falopio. Si no le extirpan ambos ovarios en el momento de la histerectomía, sus síntomas pueden reaparecer.

 ¿Cuál es el pronóstico de la endometriosis?

La hormonoterapia y la laparoscopia no pueden curar la endometriosis; sin embargo, estos tratamientos pueden aliviar parcial o totalmente los síntomas en muchas pacientes durante años.
El hecho de extirpar el útero (matriz), ambos ovarios y las trompas de Falopio (histerectomía) supone la mejor probabilidad de cura. En muy pocas ocasiones, la endometriosis puede reaparecer.

¿Qué complicaciones pueden aparecer?

La endometriosis puede llevar a problemas para quedar embarazada (esterilidad). No todas las mujeres, sobre todo aquellas con endometriosis leve, tendrán esterilidad. La laparoscopia para eliminar la cicatrización relacionada con la afección puede ayudar a mejorar sus probabilidades de quedar embarazada. Si no sucede así, se debe contemplar la posibilidad de realizarse tratamientos contra la esterilidad.
Otras complicaciones de la endometriosis abarcan:
  • Dolor pélvico crónico o prolongado que interfiere con las actividades sociales y laborales.
  • Quistes grandes en la pelvis (llamados endometriomas) que pueden romperse.

Prevención

Las pastillas anticonceptivas pueden a ayudar a prevenir o retardar el desarrollo de la endometriosis.

Como curiosidad, os adjuntamos un enlace de una noticia reciente que relaciona los pesticidas con la endometriosis. Para verla, haz clic aquí.

10 ERRORES TÍPICOS EN MADRES PRIMERIZAS

Ser madre primeriza te hace cometer errores con tu bebé por falta de experiencia y de información o por el exceso de cuidados.
A continuación hablaremos de algunos de los errores más comunes.

Hacer caso de todo lo que te dicen otras madres y las abuelas: escucha las opiniones que te dan pero si tienes alguna duda consúltala con el pediatra ya que es el que más experiencia tiene y más te va a ayudar.


Bañar al bebé todos los días: esto no es necesario, es suficiente con que lo bañes dos o tres veces a la semana ya que el manto graso de la piel del bebé se altera con el baño.


Abrigar demasiado al bebé: no debes abrigar demasiado a tu bebé. Si el bebé tiene frío tendrá sus manos y sus pies fríos y un poco amoratados; por el contrario si tiene calor sudará por la zona del cuello y cabeza.

No permitir que nadie coja el bebé: no pasa nada porque tus familiares y amigos cojan al bebé, le den besos, etc. lo único que debes intentar es que no esté cerca de alguien enfermo para evitar que se contagie.

Esterilizar todos sus objetos: debes intentar que las cosas de tu bebé estén limpias pero no debes esterilizar todo ya que de esa manera el niño no entra en contacto con bacterias y no desarrolla sus propias defensas.

Tener la casa en silencio mientras el bebé duerme durante el día: el bebé debe acostumbrarse a los ruidos cotidianos de la casa y a la luz del día. Entre otras cosas porque si se acostumbra a dormir en silencio absoluto después se sobresaltará con cualquier ruido.

Meter en la cama al bebé cuando no quiere dormir: si el bebé se acostumbra a dormir en cama contigo después no querrá dormir en su cuna. Además debes tener mucho cuidado ya que corres el riesgo de quedarte dormida y puedes aplasta al bebé.

Rapar la cabeza del bebé: es una falsa creencia que si se rapa la cabeza del bebé el pelo le crece más fuerte.

Cambiar de pecho al bebé antes de que termine: la leche que está al final es la que tiene mayor contenido en grasa, por lo que es la que más alimenta, entonces debes dejar que la acabe antes de cambiarlo de pecho. Sabrás que ha vaciado el pecho cuando éste esté completamente blando.


No te hagas la fuerte: el parto y la adaptación a tu nueva vida requieren un gran esfuerzo físico y mental por lo que debes ser capaz de pedir y dejarte ayudar.

martes, 26 de noviembre de 2013

CORDOCENTESIS

La cordocentesis consiste en la punción del cordón umbilical que une el feto con la madre, para la obtención de una muestra directa de sangre fetal, con fines diagnósticos y terapéuticos.
El análisis de la muestra obtenida sirve para detectar malformaciones cromosómicas en el feto, si existe alguna infección, para administrar tratamiento, etc.
Esta es una prueba médica que se realiza durante el segundo trimestre del embarazo, sobre la semana 18 y 19 de gestación.

¿CÓMO SE HACE?
Previamente a la cordocentesis debe realizarse una ecografía para determinar la posición y tamaño del feto y localizar la placenta y el cordón umbilical.
A continuación se debe realizar una asepsia de la pared abdominal y elegir la ubicación adecuada para realizar la punción.
Guiándose por la ecografía el médico realiza la punción, atravesando la pared abdominal y el útero hasta llegar al cordón umbilical. Cuando se llega con la aguja al cordón umbilical se extraen entre tres y cinco mililitros de sangre fetal.
Después de realizada la extracción la mujer debe guardar reposo durante 48 horas.

¿CUÁNDO SE DEBE REALIZAR?
  • Estudios cito-genéticos:
    • Cuando se observa en la ecografía alguna anomalía en la estructura del feto.
    • Para confirmar resultados de la amniocentesis, cuando no se ha obtenido suficiente muestra de líquido amniótico o el resultado de la amniocentesis es dudoso
    • Cuando el feto no está creciendo correctamente y la cantidad de líquido amniótico está disminuido de forma inexplicable
  • Cuando existe el riesgo de anomalías cromosómicas
  • Si el feto padece una infección y es necesario detectar agentes patógenos o anticuerpo
  • Si existe sospecha de anemia en el feto o de niveles bajos de plaquetas en sangre fetal
  • Para el estudio de la función renal cuando se diagnostica una alteración renal en el feto de tipo uropatía obstructiva
  • Diagnosticar enfermedades de la coagulación
  • Cuando la gestante ha acudido tardíamente y ya no puede hacerse una amniocentesis
  • Para administrar medicamentos a través del cordón umbilical para el feto, por ejemplo si padece una enfermedad del corazón; o para realizar una transfusión

RIESGOS
Las complicaciones más frecuentes de la punción umbilical son la hemorragia, las contracciones, las lesiones de estructuras vecinas, las infecciones, la eliminación de líquido amniótico que puede llegar a causar un aborto involuntario o un nacimiento prematuro, etc.
La muerte del feto es una complicación que aparece raras veces, pero la probabilidad de que esto suceda aumenta proporcionalmente a las veces que se tenga que repetir la punción.


FUENTES:

AFECCIONES COMUNES DE LOS RECIÉN NACIDOS

Con frecuencia los recién nacidos pueden presentar algún problema de salud; entre los más comunes se incluyen los resfriados, tos, fiebre y vómitos, además de diversos problemas de piel.
Algunas afecciones físicas son muy comunes durante las primeras semanas posteriores al nacimiento, y entre las más frecuentes se encuentran:
  • Distensión abdominal: por lo general, las barrigas de la mayoría de los bebés sobresalen, especialmente después de una toma abundante. Sin embargo, entre las tomas, deben sentirse bastante blandas. Si el abdomen del pequeño se ve hinchado y duro, y si no ha tenido una deposición durante más de uno o dos días, o tiene vómitos, llame a su pediatra. Es muy probable que el problema se deba a gases o estreñimiento, pero también podría indicar un problema intestinal más grave.

     
  • Lesiones durante el parto: es posible que los bebés se lesionen durante el parto, especialmente si el trabajo de parto es particularmente largo o dificultoso, o cuando los bebés son muy grandes. Mientras que los recién nacidos se recuperan rápidamente de algunas de estas lesiones, otras persisten durante más tiempo. A menudo, la lesión es una clavícula rota, que se cura rápidamente si el brazo de ese lado se mantiene relativamente inmóvil. De hecho, puede formarse un pequeño bulto en el sitio de la fractura después de algunas semanas, pero no se asuste; este es un signo positivo de que se está formando hueso nuevo para curar la lesión. La debilidad muscular es otra lesión de nacimiento común, causada durante el trabajo de parto por la presión o el estiramiento de los nervios conectados a los músculos. Por lo general, estos músculos, que suelen estar debilitados a un lado de la cara o de un hombro o brazo, vuelven a la normalidad después de varias semanas. Mientras tanto, pídale a su pediatra que le muestre cómo amamantar y sostener al bebé para promover la curación.

  • Síndrome del bebé azul: los bebés pueden tener las manos y los pies levemente azulados, pero es posible que esto no sea un motivo de preocupación. Si sus manos y pies se vuelven un poco azulados a causa del frío, deberían recuperar su color rosado apenas se calientan. Ocasionalmente, la cara, la lengua y los labios pueden volverse un poco azulados cuando el bebé no para de llorar, pero cuando se calma, su color en estas partes del cuerpo debe volver a la normalidad rápidamente. Sin embargo, si la piel se vuelve de un color azulado de manera persistente, especialmente con dificultades para respirar y alimentarse, esto es un signo de que el corazón o los pulmones no están funcionando correctamente, y de que el bebé no está recibiendo suficiente oxígeno en la sangre. La atención médica inmediata es fundamental.
  • Tos: si el bebé toma líquido muy rápido o trata de beber agua por primera vez, es posible que tosa y escupa un poco; pero este tipo de tos debería detenerse apenas se ajuste a una rutina de alimentación familiar. También puede estar relacionada con la fuerza o la rapidez con la que baja la leche de la mamá. Si el bebé tose continuamente o tiene arcadas rutinariamente durante las tomas, consulte con el pediatra. Estos síntomas podrían indicar un problema subyacente en los pulmones o el tracto digestivo.

            

  •  Llanto excesivo: todos los recién nacidos lloran, a menudo, sin un motivo aparente. Si se ha asegurado de que su bebé se alimentó, eructó, se mantiene caliente y tiene un pañal limpio, probablemente, la mejor táctica es sostenerlo y hablarle o cantarle hasta que deje de llorar. No puede “consentir” a un bebé de esta edad prestándole mucha atención. Si esto no funciona, envuélvalo bien en una manta de manera cómoda.Se acostumbrará al patrón de llanto normal de su bebé. Si alguna vez suena extraño; por ejemplo, como alaridos de dolor, o si alguna vez persiste durante un período inusual, podría significar un problema médico. Llame al pediatra y pídale asesoramiento.
  • Marcas de fórceps: cuando se usan fórceps para brindar ayuda durante un parto, estos pueden dejar marcas rojas o, incluso, raspados superficiales en la cara y la cabeza de un recién nacido, en la zona donde el metal ejerció presión sobre la piel. Por lo general, estos desaparecen en pocos días. A veces, se desarrolla un bulto firme y plano en una de estas zonas debido a un daño menor en el tejido que se encuentra debajo de la piel. Sin embargo, esto también suele desaparecer en el término de dos meses.


  • Ictericia: muchos recién nacidos normales y saludables tienen un tinte amarillento en la piel, que se conoce como ictericia. Esto se debe a una acumulación de una sustancia química, denominada bilirrubina, en la sangre del niño. Esto ocurre con más frecuencia cuando el hígado inmaduro aún no ha comenzado a cumplir su función de eliminar la bilirrubina del torrente sanguíneo en forma eficiente (la bilirrubina se forma por la descomposición normal de los glóbulos rojos en el cuerpo). Si bien los bebés suelen tener un caso leve de ictericia, que es inofensivo, la ictericia puede convertirse en una afección grave si la bilirrubina llega a lo que un pediatra considera como un nivel muy alto.   
    Aunque la ictericia es bastante tratable, si el nivel de bilirrubina es muy alto y no es tratado de manera efectiva, en algunos casos, incluso puede provocar un daño en el sistema nervioso o el cerebro. Es por eso que la afección debe controlarse y tratarse adecuadamente. La ictericia tiende a ser más común en los bebés que están en período de lactancia, con más frecuencia en aquellos que no está tomando el pecho correctamente; las madres que están amamantando deben dar el pecho, al menos, entre ocho y doce veces por día, lo que ayudará a producir suficiente leche y a mantener bajos los niveles de bilirrubina. 
  • Letargo y adormecimiento: todos los recién nacidos pasan la mayoría del tiempo durmiendo. Siempre que se despierte cada pocas horas, coma bien, parezca estar contento y esté alerta durante parte del día, es totalmente normal que duerma el resto del tiempo. Sin embargo, si rara vez está alerta, no se despierta por sí solo para alimentarse, o parece estar demasiado cansado o desinteresado en comer, debe consultar con su pediatra. Este letargo, especialmente si es un cambio repentino en su patrón habitual, puede ser un síntoma de una enfermedad grave.
  • Dificultad respiratoria: es posible que el bebé tarde algunas horas después del nacimiento para formar un patrón normal de respiración, pero, luego, no debería tener más dificultades. Si parece estar respirando de una manera inusual, a menudo, esto se debe a un bloqueo en los conductos nasales. El uso de gotas nasales de solución salina, seguido del uso de una perilla succionadora, es lo que puede resultar necesario para solucionar el problema; ambos están disponibles sin receta en todas las farmacias. Sin embargo, si su recién nacido muestra alguno de los siguientes signos de advertencia, notifique a su pediatra inmediatamente:
    • Respiración rápida (más de sesenta respiraciones en un minuto), aunque debe tener en cuenta que, normalmente, los bebés respiran más rápido que los adultos.
    • Retracciones (succión en los músculos que se encuentran entre las costillas con cada respiración, que hace que sus costillas sobresalgan).
    • Ensanchamiento de la nariz.
    • Resoplidos durante la respiración.
    • Coloración azul de la piel persistente.

ALFAFETOPROTEÍNA

La alfafetoproteína (AFP) es una proteína que normalmente es producida por el hígado del bebé. Está presente en el líquido amniótico que rodea el feto y una pequeña cantidad cruza la placenta y se introduce en el torrente sanguíneo de la madre. A medida que el bebé va creciendo produce más AFP, por lo que la cantidad en la sangre de la madre también aumenta.

¿A QUIÉN SE LA HACE Y PORQUÉ?
Se trata de una prueba de cribaje, es decir, nos da la probabilidad de que el feto sufra la enfermedad pero no la diagnostica.
Esta prueba se le ofrece a todas las mujeres embarazadas, pero se suele recomendar la realización de la misma a mujeres jóvenes que por su edad no tienen el riesgo de anomalías cromosómicas, pero presentan antecedentes familiares, riesgo en embarazos anteriores o abortos de repetición.

Se realiza con el objetivo de:
  • Detectar defectos en el tubo neuronal (espina bífida) u otras anomalías congénitas
  • Detectar problemas en el bebé durante el embarazo (como bajo peso)
  • Detectar Síndrome de Down
  • Detectar otras malformaciones
  • Diagnosticar ciertos trastornos hepáticos
  • Detectar embarazos múltiples

¿CÓMO Y CUÁNDO?
La prueba de la alfafetoproteína implica simplemente la extracción de una muestra de sangre a la mujer para su posterior análisis.
La alfafetoproteína normalmente aumenta en el líquido amniótico hasta la semana 14-15 de gestación. Por esto, el análisis se debe realiza aproximadamente entre la semana 14 y 16.

RESULTADOS
La cantidad de alfafetoproteína que se considera normal depende de muchas variables incluyendo la edad, el peso, la raza y la semana del embarazo, por lo tanto es importante conocer la fecha exacta de la gestación para la realización de dicha prueba.
  • Si el nivel de AFP es alto indica que el feto tiene un mayor riesgo de sufrir defectos del tubo neuronal como espina bífida, anencefalia, etc. o la posibilidad de un embarazo múltiple (gemelos, trillizos).
  • Por el contrario si el nivel de AFP es bajo está relacionado con un mayor riesgo de sufrir anomalías cromosómicas como Síndrome de Down, Síndrome de Turner, etc.
Si los resultados son anormales se le sugerirán pruebas adicionales para ayudar a determinar la causa.
Por último, si los exámenes posteriores no muestran defectos anatómicos o problemas de cromosomas, un nivel de AFP elevado puede predecir problemas de crecimiento fetal durante el embarazo.

RIESGOS
Los riesgos de esta prueba son los asociados a la con la extracción de sangre, que pueden ser:
Hematomas en la zona de la punción Sangrado excesivo Desmayo o sensación de mareo Infección en la zona de punción.


FUENTES:

lunes, 25 de noviembre de 2013

TEST DE TOLERANCIA ORAL DE LA GLUCOSA (TTOG)

La prueba de tolerancia oral de la glucosa es un examen de laboratorio para verificar la forma como el cuerpo descompone el azúcar ingerido.
Esta se realiza para confirmar el diagnóstico de diabetes gestacional en mujeres embarazadas y se hace entre las semanas 24 y 28 del embarazo.

¿CÓMO SE REALIZA LA PRUEBA?
Los días previos a la prueba debe comer como lo hace normalmente; y al menos 8 horas antes y durante la realización del examen no debe comer ni beber nada.
Antes de comenzar el examen se toma una muestra de sangre para tener un valor de referencia del nivel de glucosa en ayunas.
Posteriormente se te solicita que tomes un líquido que contiene una cierta cantidad de glucosa, (normalmente 75 gramos).
Una vez ingerido el líquido se procede a tomar nuevas muestras de sangre cada 30 minutos y se tomarán durante tres horas.
Algunas personas experimentan náuseas o sudoración después de tomar la glucosa, pero sin embargo, los efectos secundarios en este examen son infrecuentes.

VALORES NORMALES
Los valores sanguíneos normales en una prueba de tolerancia a la glucosa oral utilizada para detectar diabetes gestacional son:

NOTA: los rangos de los valores normales pueden variar entre diferentes laboratorios.

RESULTADOS ANORMALES
Niveles de glucosa superiores a los normales pueden significar que usted tiene prediabetes o diabetes gestacional.
Si el resultado se encuentra entre 140 y 200 mg/dL se denomina alteración de la tolerancia a la glucosa, lo que significa que usted está en mayor riesgo de padecer diabetes.
Y un nivel de glucosa de 200 mg/dL o superior es un signo de diabetes gestacional.

RIESGOS
Los riesgos a los que nos enfrentamos a la hora de realizar esta prueba están relacionados con el proceso de la extracción de muestras de sangre por lo que pueden ser:

  • Hematomas en la zona de punción
  • Desmayo o sensación de mareo
  • Sangrado excesivo
  • Infección en la zona de punción

CONSIDERACIONES
Existen diversos factores que pueden afectar a los resultados del examen como pueden ser:
  • El estrés agudo
  • El ejercicio excesivo 
  • Algunos fármacos que producen intolerancia a la glucosa:
    • Dextrosa
    • Anti-psicóticos atípicos
    • Betabloqueadores
    • Corticoesteroides
    • Estrógenos
    • Glucagón
    • Fenotiazinas
    • Diuréticos tiazídicos
    • Antidepresivos tricíclicos
Si está tomando alguno de estos medicamentos coménteselo a su médico antes de la realización del examen.


FUENTES:

TEST DE O´SULLIVAN


El test de O´Sullivan es una prueba que se realiza para valorar los niveles de azúcar en sangre venosa, con el objetivo de descartar los casos de diabetes gestacional.
Se le hace a todas las embarazadas por lo menos una vez pero, si se necesita, puede hacerse en más ocasiones.

¿CUÁNDO SE REALIZA?
Se suele hacer entre la semana 24 y 28 de gestación porque es cuando los cambios hormonales tienen más efecto y pueden llegar a alterar el funcionamiento de la insulina.

Si se trata de una mujer que tuvo diabetes gestacional en un embarazo anterior esta prueba ya se puede hacer en el primer trimestre.
Además se puede realizar la prueba en el primer y tercer trimestre si hay antecedentes familiares de diabetes, si la mujer embarazada tiene más de 35 años, si hay sobrepeso antes del embarazo o si la mujer ya dio a luz a un bebé de más de 4kg en un parto anterior.

¿CÓMO?
El test de O´Sullivan es una prueba que se realiza de la siguiente manera:

Se le da a la embarazada una solución de 50gr de glucosa para que la beba.
Tras haber bebido la solución debe esperar una hora sin comer nada.
Pasada la hora de espera se le realiza una extracción de sangre y en esta muestra se mide el nivel de glucosa en sangre.
Con esta medida el especialista recibe información sobre cómo la embarazada tolera y metaboliza la glucosa.

RESULTADOS
Si el nivel de glucosa en sangre, una hora después de la ingesta de la solución de glucosa, es inferior a 130mg/dl esto significa que tolera bien la glucosa y que no hay problemas.
Si el nivel de glucosa está entre 130 y 140mg/dl, el especialista debe decidir si realizar otra prueba de glucosa o aceptar este resultado como indicador de que se tolera la glucosa adecuadamente.
Si el valor de la glucemia es superior a 140mg/dl esto nos indica que puede existir diabetes gestacional, entonces debemos realizar otra prueba, el TTOG (test de tolerancia oral a la glucosa), para asegurar el diagnóstico.



FUENTES:

domingo, 24 de noviembre de 2013

BIOPSIA DE CORION

La biopsia corial es un estudio prenatal que detecta anormalidades en los cromosomas del bebé, mediante el análisis de la composición genética de las vellosidades coriónicas.
Sólo se realiza en las futuras madres en las que existe algún problema genético concreto en la historia familiar o un factor de riesgo determinado.

¿QUÉ DETECTA?

Generalmente la biopsia de corión se utiliza para identificar ciertos trastornos como el síndrome de Down o para descartar otros problemas como la enfermedad de Tay-Sachs, la fibrosis quística o la anemia de las células falciformes, si hay razones para pensar que el bebé corre el riesgo de padecerlos.
Pero no puede detectar defectos en el tubo neural, como por ejemplo la espina bífida.

¿CUÁNDO Y CÓMO SE REALIZA LA PRUEBA?
Generalmente se realiza entre las semanas 11 y 12 de embarazo, aunque algunos especialistas la realizan en la semana 13.

Este estudio es un procedimiento de diagnóstico invasivo que consiste en la obtención de vellosidades coriales de la placenta. 
El ginecólogo hará una ecografía para determinar la posición de la placenta y dependiendo del lugar por donde esté unida al útero decide si realizará una biopsia de corión transcervical o transabdominal.

Si se hace una biopsia transcervical el procedimiento es el siguiente: se limpia la vulva, la vagina y el cuello del útero con un antiséptico. Se introduce un espéculo vaginal y se localiza el cervix. Se introduce una pinza semirrígida a través del cuello uterino, se accede al corion frondoso (placenta) y de ahí se extrae una muestra de las vellosidades coriales. Todo esto se realiza con control continuo mediante un ecógrafo.
Si se hace una biopsia transabdominal: primero el ginecólogo realiza una asepsia de la pared abdominal y posteriormente pondrá anestesia local en el lugar en donde insertará la aguja. A continuación insertará una aguja larga o un catéter, a través del abdomen o del cuello uterino, para succionar una pequeña muestra de tejido. En ningún caso debe de tocar el saco amniótico.

Una vez terminada la prueba, el ginecólogo debe controlar el ritmo cardíaco del bebé con un monitor fetal externo o con una ecografía.

RIESGOS
Las complicaciones más frecuentes de la biopsia corial son el sangrado vaginal, si se realiza por vía transcervical, y el dolor abdominal en la zona de la punción, en el caso de haberse realizado por vía transabdominal.
Existe un pequeño riesgo, aproximadamente del 1%, de rotura prematura de membranas y de infección del líquido amniótico y de las membranas.
El riesgo de aborto ha ido disminuyendo con la experiencia de los equipos, siendo en la actualidad alrededor del 1%. Además cabe destacar que el riesgo de aborto es más alto si se realiza en el primer trimestre que en el segundo.
También hay estudios que indican que una biopsia de corión realizada antes de la semana 11 del embarazo puede conllevar defectos en las extremidades del bebé, como falta de dedos en los pies o las manos.


FUENTES:

http://www.elpartoesnuestro.es/informacion/embarazo/amniocentesis-y-biopsia-corial

AMNIOCENTESIS

La amniocentesis es un estudio que se hace durante el embarazo con el que se buscan anomalías congénitas y problemas genéticos en el bebé que se está gestando y además permite recoger información sobre su desarrollo.
Esta prueba se realiza mediante la toma de una muestra de líquido amniótico, que es el líquido que rodea al bebé en el útero, y se realiza entre las semanas 16 y 22 del embarazo.

¿CÓMO SE REALIZA EL EXAMEN?
Previamente, o ese mismo día antes de realizar la amniocentesis, se hace un ultrasonido para medir al bebé y observar su anatomía básica.
Para la realización de la prueba debes estar acostada en una camilla y limpiarán tu abdomen con alcohol o una solución de yodo.

Un médico o técnico hará un ultrasonido para localizar una parte de líquido amniótico que se encuentre a una distancia segura tanto de tu bebé como de la placenta.
A continuación, con la guía constante de las imágenes del ultrasonido, el médico insertará una aguja larga, delgada y hueca a través de tu vientre, hasta llegar al interior del saco de líquido donde se encuentra el bebé. Tomará una pequeña muestra de líquido amniótico, retirará la aguja y por último se recogerá la muestra de líquido para enviarla a analizar.
Es posible que sientas algo de dolor, una punzada o presión durante el procedimiento, o quizás, no sientas nada de molestia.



¿POR QUÉ SE HACE?
La razón más común para realizar una amniocentesis es determinar si el bebé posee un mayor riesgo de tener problemas genéticos o cromosómicos, como el Síndrome de Down o algún tipo de transtorno metabólico que se transmiten de padres a hijos.

Otros de los motivos por los que se puede realizar una amniocentesis son:

  • Para determinar si los pulmones de tu bebé están lo suficientemente maduros. 
  • Para detectar espina bífida u otros defectos del tubo neuronal. 
  • Para determinar si tienes riesgo de sufrir un parto prematuro o si es necesario adelantar el parto. 
  • Para diagnosticar o descartar una infección intrauterina.

¿A QUIÉN?
Se les ofrece a las mujeres que tienen un mayor riesgo de tener un hijo con anomalías congénitas, es decir, mujeres que:

  • Tengan 35 años o más cuando den a luz. 
  • Obtuvieran un resultado positivo en alguna de las pruebas de detección de anomalías congénitas. 
  • Hayan tenido bebés con anomalías congénitas en embarazos anteriores. 
  • Tengan antecedentes familiares de trastornos genéticos.


¿QUÉ RIESGOS TIENE?
Si este examen es realizado por un ginecólogo con amplia experiencia los riesgos son mínimos, pero aún así existe algunos como:
  • Aborto espontáneo 
  • Infección o lesión del bebé 
  • Escape de líquido amniótico 
  • Sangrado vaginal

FUENTES:

sábado, 23 de noviembre de 2013

BEBÉ PREMATURO: CUIDADOS BÁSICOS

 Noticia: El emotivo vídeo del primer año de un bebé prematuro conmociona Internet


Un bebé prematuro es aquel que ha nacido antes de las 37 semanas completas de gestación (más de tres semanas antes de la "fecha prevista del parto"). Un embarazo a término es de 40 semanas.
Durante el embarazo, el feto se desarrolla y crece, sobre todo, en los últimos meses y semanas. Debido a su nacimiento anticipado, los bebés prematuros pesan mucho menos que los que cumplieron su gestación hasta el plazo normal. Además, pueden tener problemas de salud, ya que sus órganos no han tenido el tiempo suficiente para desarrollarse. Los prematuros necesitan atención médica especial en una unidad de cuidados intensivos neonatal o UCIN. Deben permanecer ahí hasta que sus sistemas y órganos puedan funcionar sin ayuda.


A menudo, la causa de un parto prematuro se desconoce y es algo que la madre no puede controlar. De todos modos, los partos prematuros a veces están provocados por afecciones médicas de la madre o factores de su estilo de vida durante el embarazo, como padecer diabetes mellitus, hipertensión, problemas renales o cardíacos, una infección (sobre todo las que afectan a las membranas amnióticas y al aparato genital y urinario), no haberse alimentado bien durante el embarazo, o los sangrados provocados por una posición anómala de la placenta.


Asimismo, los partos prematuros pueden obedecer a anomalías estructurales, al hecho de forzar demasiado el útero por llevar más de un feto (mellizos, trillizos, o más) o al consumo de tabaco, alcohol o drogas ilegales durante el embarazo. Los partos prematuros son más frecuentes en las mujeres menores de 19 años o mayores de 40, y en las que ya han tenido un parto prematuro previamente.  No obstante, cualquier mujer puede tener un parto prematuro, y muchas madres de bebés prematuros carecen de factores causantes conocidos.

Los bebés prematuros tienen muchas necesidades especiales, de modo que deben recibir cuidados médicos diferentes que los bebés a término. Por este motivo, suelen pasar la primera etapa de la vida extrauterina en una unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN). La UCIN está diseñada para proporcionar a los bebés prematuros una atmósfera que les limite el estrés y que satisfaga sus necesidades básicas de calor, nutrición y protección para asegurarles un crecimiento y desarrollo adecuados.
Gracias a la gran cantidad de avances recientes en medicina neonatal, más del 90% de los bebés prematuros que pesan 800 gramos o más (un poco menos de dos libras) sobreviven. Los que pesan más de 500 gramos (un poco más de una libra) tienen más del 60% de probabilidades de sobrevivir, aunque las probabilidades de que sufran complicaciones son mayores.

Necesidades básicas de un bebé prematuro

 

Calor

Los bebés prematuros carecen de la grasa corporal necesaria para mantener la temperatura corporal, incluso aunque estén bien abrigados con mantas. Por este motivo, se utilizan incubadoras o calentadores radiantes para mantener su temperatura en la UCIN. El hecho de mantener la temperatura de los bebés dentro de los márgenes de la normalidad les ayudará a crecer más deprisa.
Las incubadoras están fabricadas con plástico transparente y rodean completamente el cuerpo del bebé para mantenerlo cálido, reducir las probabilidades de infección y limitar la pérdida de agua. Los calentadores radiantes son camas abiertas que se calientan eléctricamente. Se utilizan cuando el personal médico necesita acceder frecuentemente al bebé para procurarle los cuidados que necesita. Un diminuto termómetro pegado a la piel del bebé se encarga de medir su temperatura corporal y de regular el calor.


Nutrición y crecimiento

Los bebés prematuros tienen necesidades nutricionales especiales porque crecen más deprisa que los bebés a término y sus sistemas digestivos son inmaduros. Los neonatólogos (pediatras especializados en el cuidado de recién nacidos a término enfermos y de bebés prematuros) miden el peso de los bebés en gramos, no en libras y onzas. Los bebés a término suelen pesar más de 2.500 gramos (aproximadamente cinco libras y ocho onzas), mientras que los bebés prematuros pesan entre 500 y 2.500 gramos.
Entonces, ¿de qué se alimentan los bebés prematuros? La leche materna es una excelente fuente nutricional, pero los bebés prematuros son demasiado inmaduros para alimentarse directamente del pecho de la madre o del biberón hasta que tienen una edad gestacional de entre 32 y 34 semanas. La mayoría de bebés prematuros tienen que alimentarse muy lentamente debido al riesgo de desarrollar una infección intestinal exclusivamente propia de los bebés prematuros denominada enterocolitis necrosante. La madre se puede extraer leche para que se la administren después al bebé mediante una sonda, es decir, un tubito que se introduce por la boca o la nariz del bebé y le llega hasta el estómago.
La leche materna tiene ventajas sobre la leche artificial porque contiene proteínas que ayudan a luchar contra las infecciones y favorece el crecimiento. A veces la leche materna (o la leche artificial si la madre no desea o no puede dar el pecho al bebé) se enriquece con suplementos especiales, porque los bebés prematuros tienen mayores necesidades de vitaminas y minerales que los bebés a término.
Prácticamente todos los bebés prematuros reciben suplementos de calcio y fósforo, sea añadiéndoselos a la leche materna o a través de leches infantiles especiales para prematuros. La concentración de sustancias químicas y minerales en la sangre de estos bebés, como la glucosa (azúcar), la sal, el potasio, el calcio, el fosfato y el magnesio, se controla regularmente, adecuando la dieta del bebé para mantener estas sustancias dentro de los márgenes de la normalidad.